La prueba química sanguínea consiste en analizar e identificar los niveles de diferentes compuestos químicos encontrados en la sangre (3, 7, 14 ó 32 elementos) que ayudan al médico a prevenir y diagnosticar alguna enfermedad o en otros casos, determinar el mejor tratamiento y dar seguimiento al estado de salud del paciente. Estos compuestos pueden ser: Glucosa, ácido úrico, colesterol, urea, triglicéridos, creatinina, entre otros